Contexto: la palabra estrategia se define como el arte de dirigir las operaciones militares. También se suele confundir tácticas con estrategias (las tácticas son acciones que se realizan en la batalla, mientras que las estrategias son los planes previos a ella). Cuando escuchamos sobre pensamiento estratégico creemos que solo se refiere a asuntos militares, de conquistas o mercadotecnia y no se equivocan; pero las estrategias no se limitan solo a las acciones militares o de negocios, va mucho más allá de lo que creemos, ya que el pensamiento estratégico puede tener un impacto positivo en cualquier área de nuestras vidas.
El pensamiento estratégico es aquel que se centra en un enfoque orientado hacia el futuro. Tiene en cuenta una estrategia para conseguir algo en concreto, además de un plan de acción para lograr los objetivos deseados.
El pensamiento estratégico nos ayuda a planear, a volvernos mas eficientes, a llevar al máximo nuestras capacidades y a encontrar un camino mas directo para alcanzar cualquier objetivo ya sea personal, profesional, o de negocios.
Estos son algunos beneficios del pensamiento estratégico:
- El pensamiento estratégico simplifica lo difícil: en realidad el pensamiento estratégico no es nada más que una planeación aumentada. Como decía Miguel de Cervantes en Don Quijote: El hombre bien preparado para la lucha ya ha ganado la mitad de la batalla.
- El pensamiento estratégico lo forzará a hacer las preguntas indicadas: ¿Por qué hago esto?, ¿Qué voy a hacer después?, ¿Quiénes son las personas indicadas para esto?, ¿Cuál es el costo en dinero?, ¿Cuánto tiempo me tomara esto?, ¿Cómo puedo ser más eficiente?, etc.
- El pensamiento estratégico promueve la adaptación: en un mundo tan cambiante los imprevistos y las mejoras suelen ocurrir, por ende, las estrategias pueden cambiar y adaptarse a nuevas situaciones.
- El pensamiento estratégico te prepara hoy para un mañana incierto: Peter Duckert, padre de la administración moderna nos dice que la planificación estratégica no tiene que ver con las decisiones futuras; trata con el impacto que tendrán a futuro las decisiones del presente. Las decisiones solo existen en el presente, la pregunta que enfrenta quien toma decisiones de forma estratégica es ¿Qué debemos hacer hoy con el fin de estar listos para un mañana incierto?
- El pensamiento estratégico le da influencias con los demás: quien tiene el plan es quien tiene el poder, sin importar la clase de actividad que desempeñe.
- El pensamiento estratégico reduce el margen de error: en cualquier momento en el cual realice acciones apresuradas o reaccione con excesiva rapidez, aumenta su margen de error. El pensamiento estratégico reduce en gran medida ese margen de error, alineando sus acciones con sus objetivos. Mientras mas alineado este a sus objetivos, mayores serán las probabilidades de que vaya en la dirección correcta.
Se dice que la herramienta más importante del pensamiento estratégico es el análisis. Esto se debe a que el pensamiento estratégico es una extensión lógica del pensamiento analítico. El pensamiento estratégico es un conjunto de habilidades diversas que se combinan para ayudar a anticiparse a los cambios futuros y tomar decisiones eficaces mediante un análisis profundo. Es importante utilizar varias fuentes, comparar, analizar y sacar conclusiones.
La planificación estratégica es eficaz si una persona puede cambiar y explorar la información desde diferentes perspectivas. La capacidad de anticipar el futuro a partir de los datos de referencia y las tendencias actuales es una de las principales habilidades de un estratega.
En conclusión, un estratega no es alguien que se fija un objetivo y trata de alcanzarlo a cualquier precio. Es una persona que está en constante aprendizaje y reacciona a los cambios en el momento oportuno aplicando las mejoras necesarias. Un estratega debe deshacerse de los prejuicios y las convenciones y tener un espacio de descanso. El estrés intelectual continuo puede conducir al agotamiento. Para mantener la salud mental y una mente clara, es necesario pasar de la actividad mental a la actividad física. Ponerse en forma, salir a pasear, jugar al aire libre, ir de excursión… todo esto ayuda a recargar la energía y a mantener la motivación.
Recuerde que el pensamiento estratégico es el puente que une el lugar donde usted esta con aquel donde quisiera estar. Cuando fallar no es una opción, nada le sirve más a una persona que el pensamiento estratégico.
Libro: John C. Maxwell, Piense para obtener un cambio.